
Se acaba el año y estos días me da por echar la vista atrás y recordar. No sé si son cosas buenas o malas, pero son mis cosas. Igual os resultan un poco tontas o igual no. Puede que os haya pasado algo parecido e incluso os lleguéis a sentir un poquito identificadas o identificados… o puede que no.
Por ejemplo: he aprendido a coser a máquina. Tampoco es que me haya convertido en una experta, pero voy avanzando. También me he atrevido a hacer el famoso solomillo Wellington, que me parecía que iba a ser muy complicado y tampoco era para tanto y hasta les gustó. He comido por primera vez os pastéis de Belém y sólo espero que no sea la última… He paseado sola por ciudades que no son la mía y he comprobado que sé orientarme, sólo se necesita poner un poquito de atención en los detalles. También he descubierto que puedo ir sola al cine y que, si de verdad tengo ganas de ver una película, tampoco necesito esperar a que alguien se quede libre y pueda acompañarme. He ido a ver por primera vez el Guernica y lo he mirado, y me he emocionado y luego he descubierto que me podría pegar horas y horas en el Reina Sofía o en el Prado. He practicado la maravillosa virtud de esperar y confiar. Me he dado cuenta de que soy capaz de dormir mientras alguno de mis hijos sigue fuera de casa y, lo que me resulta todavía más sorprendente, también he comprobado que incluso soy capaz de despertarme en el mismo instante en el que oigo la llave en la cerradura de la puerta. Es como volver a la etapa de la lactancia, pero de otra manera. He esperado y he confiado… en salas de hospital, en oficinas de colocación, en andenes de estación. He disfrutado como nunca del mar, de alguna playa, de unas cuantas puestas de sol… Me he enamorado y me he vuelto a enamorar.
He conocido a Susi y a Michel, padres coraje que me han enseñado que luchar por tus hijos, por difíciles que se pongan las cosas, no está reñido con mantener la sonrisa y la alegría como motor en la vida. He conocido a Alicia, a Teresa, a Nieves… Y ellas me conocen y me vuelven a conocer cada día que las vuelvo a saludar, porque ya no se acuerdan de nada y viven en su mundo que, a saber cómo es. He conocido a Iris, a Lucas, a Oscar. Estoy segura de que serán unos adultos maravillosos… de momento son unos bebes adorables. También he conocido a Juanan, a Begoña, a Paula, a Chema, a Iguázel, a Beatriz, a Ángeles, a Antonio, a Elvira, a Rosa … Bueno, no les he conocido en persona , pero les he conocido a través de sus blogs, columnas, libros… a través de sus palabras y sus fotografías, a través de su mirada particular contando cosas. He paseado bastante, unas veces a pie y otras, simplemente, a través de las páginas de algún libro. Un día incluso me atreví a pasear (a pie) por uno de esos caminos que llevan a las afueras de mi ciudad, por el camino Miraflores, y me encontré con la España Vacía de Sergio del Molino, e incluso me encontré con el mismísimo Sergio del Molino, y le saludé tímidamente, como quien saluda al mismísimo Messi. Ni nos hicimos un selfie, aunque alguien nos sacó alguna foto, pero ninguno de los dos somos de posar mucho para las cámaras, creo yo… He fotografiado y me han fotografiado: bailando, excursioneando, merendando, celebrando… He reído, más que el año pasado, y he llorado, menos que el año pasado. No ha sido un mal año.
Un año que siempre aporta algo! Y por lo que se ve… lo has aprovechado disfrutando y luchando en cada momento! Feliz 2017!
Me gustaMe gusta
¡Feliz año para ti también! Seguimos en contacto que mira que me gustan los platos que nos propones, ¡mamma mía! Un abrazo.
Me gustaMe gusta
Y yo lo he compartido contigo y aún así me sigues sorprendiendo. ¡Qué suerte la mía!
¡Feliz 2017!
Me gustaMe gusta
¡Feliz año fotógrafa mía! (entre muchísimas más cualidades) Un besico.
Me gustaMe gusta
Buen balance, por cierto ;D
Me gustaLe gusta a 1 persona
Bueno, yo también te he conocido este año 😀
Bonito balance, no es nada tradicional pero si muy entrañable. No parece que haya sido un mal año. Me ha gustado eso de prestar atención a los detalles para orientarte en las ciudades y realmente tu te has fijado en esos pequeños detalles a la hora de hacer recuento del año que termina. Que bonito.
Todo lo mejor para el año que viene, y el siguiente…..
Seguimos en contacto,
Un abrazo!!!
Me gustaMe gusta
La lectura de tus post siempre me provocan una sonrisa como poco. Sólo por eso ha merecido la pena encontrarnos. ¡Feliz año, colega de blog!
… “colega de blog”… suena raro pero… eso es lo que somos, ¿no? 🙂
Me gustaLe gusta a 1 persona
¡Qué bonito y sencillo lo cuentas! Me hace ilusión formar parte de tu año. Y esperemos que el 2017 nos depare nuevos caminos, planes, amigos, lecturas, paseos, encuentros… Besos
Me gustaMe gusta
…. ummm! ¡Qué bonitos deseos! Que así sea, Paula. Que así sea. Un besico.
Me gustaMe gusta